Por el Valle de Sajambre

Siempre hay algún lugar nuevo por descubrir, y el Valle de Sajambre en los Picos de Europa Leoneses, ha sido un gran descubrimiento. Al norte de León, haciendo frontera con Asturias, nacimiento del río Sella.

Siguiendo la carretera desde Riaño, y su pantano, fuente de noticias en su día por la expropiación y traslado del pueblo, llegamos a Osjea de Sajambre, localidad principal del valle. Un pequeño enclavado en la parte alta del Valle y que disfruta de un bello paisaje de alta montaña y en el que se puede disfrutar de la excelente grastromía de la zona.

Desde Oseja, parte una ruta que une todos los pueblos de la zona. Saliendo desde Oseja, esta discurre por una zona de frondosos bosques , que ocasionalmente se abren y permiten disfrtuar de unas vistas espectaculares al valle y a los grandes picos de la zona.

Justo al comienzo de la ruta, nos encontramos con la Cueva del Buseco

Cotinuando el camino hacia Soto de sajambre, la senda se empina un poco y para sorpresa nuestra nos encontramos un todoterreno que baja por la senda hacia Oseja, pero la senda es muy agradable y fresca para ser verano y las vistas espectaculares. Llegando un punto en que la senda desciende nuevo para llegar a Soto de Sajambre, aparece una pequeña senda apenas transidada a nuestra izquierda y que decicimos seguir, y que gran didea, nos llevo a una zona despejada de árboles con unas vistas sublimes a los Picos de Europa.

Desde este fabuloso mirador, retornamos a la senda principal y continuamo neustro camino hasta Soto de Sajambre, donde aprovechamos para realizar un pequeño descanso y reponer electrolitos, continuar nuestro camino

Desde Soto de Sajambre, continuamos la ruta, caminando esta vez por la carrtetera, descenciendo hastallegar al mirador de Vista Alegre con unas vistas al valle y continuando un poco más adelante por la carretera, la senda se desvíaba a la derecha, con un pronunciado descenso por una zona totalmente despejada de árboles, y aunque son las tres de la tarde y el mes de agosto, parece que aprieta mucho el sol. así llegamos hasta el pueblo de Ribota, a orillas del Sella, pequeño grupo de casas en la pendiente que desciende hasta el río. desde allí retomamos la ruta paralela al Sella , en un entido ascendente y en ocasiones bastante empinado, ya se comienzan a notar las horas de camino que llevamos, (la ruta no es larga, pero el track nos ha jugado alguna que otra mala pasada)

Llegado un momento en que la senda continua paralela al río haciea Pío y aparece una senda a la izquierda que asciende hasta Oseja de Sajambre. Tras una breve parada y ya con algo de cansancio a nuestras espaldas tomamos el camino de vuelta a Oseja, ascendiendo hasta alcanzar nuestro punto de partida.

Una ruta excelente, un lugar impresionante que siempre recordaremos con cariño.

Un paraiso efímero.

En estas fechas, he tenido la suerte de descubrir que gracias a las recientes lluvias, se ha formado una pequeña laguna, en unos terrenos de labranza. Hasta ahí todo norma, llueve y se forman charcos y lagunas allá donde la tierra no traga el agua o esta no se va. Pero, y ahí viene lo interesante, la laguna está siendo visitada por aves en busca de alimento y diría que hasta de cobijo.

En varías ocasiones observé la laguna y ya las ganas de acercarme «a ver que había» me tenían en ascuas, así que armado de prismáticos y cámaras, y durante varios días, he estado visitando a primera hora la laguna y observando y fotografiando a las aves que allí se encontraban, algo que ha resultado, un gran privilegio, por tenerlo tan a la mano y poder disfrutarlo. Aunque también algo de pena , al ver como la laguna, a causa de las fuertes temperaturas, ha ido menguando, pero también lleno de esperanza, pues mientras escribo esta entrada, las lluvias que estan cayendo auguran un poco más de vida para la este pequeño paraiso al lado de casa y la posibilidad que brinda de disfrutar observando las aves que por allí pasan.

Aves, que según mi pequeña guía, han sido, fochas, cigüeñelas, moritos, patos de diversas clases (con ellos me pierdo un poco) y hasta flamencos, bueno algunos milanos han pasado por encima y se oyen cernícalos también, pero ellos están por allí de modo más habitual.

Y ya sin más os dejo con una pequeña galería de las tomás más destacadas. Espero que os gusten y lo disfruteis igual que yo, de este pequeño paraiso enfímero formado por las lluvías y que en cuanto la calor apriete desaparecerá tan rápido como se formo.

Ascensión a los Infiernos, desde el Embalse de la Sarra.

Los picos de los Infiernos son tres picos de altitudes muy similares separados por una afilada y vertiginosa cresta que se puede recorrer caminando, pero que no es apta para cualquiera. La proximidad de estos atractivos picos de más 3.000m al balneario de Panticosa y al Embalse de la Sarra en Sallent de Gallego. Nosotros decidimos tomar esta segunda opción partiendo desde el embalse y haciendo noche en el Refugio del Respomuso. para al dia siguiente continuar hasta los Infiernos y bajar hasta el embalse de nuevo.

La ruta parte desde el camino que comienza junto un asador que hay en la cola del embalse y que es parte del GR 11, desde allí y ascendiendo por el camino que discurre junto al Rio Aguas Limpias su imponente barranco y un precioso bosque, en algunos lugares hay que tener precaución ya que hay riesgos de caida, algunas cascadas que nos ayudan a refrescarnos durante la caminata. El camino inicialmente discurre encajonado por el barranco y no permite muchas vistas, pero conforme vamos ascendiendo y el barranco se abre y el bosque va desapareciendo, permitiendo contemplar las imponentes montañas. Tras casi tres horas continua subida, se nos presenta la presa del Respomuso y un edificio, que nos dío falsa alegría ya que pensamos era el refugio, pero resulto ser la Capilla de la Virgen de las Nieves, para nuestro pesar aún nos quedaba algo más de veinte minutos de camino, rodeando el ibon por nuestra izquierda.

Una de las cascadas, nada más comenzar la ascensión.
La presa del Ibon Respomuso.

Una vez echas las presentaciones en el refugio, plantamos las tiendas y nos preparamos para la cena ( en los refuguios se cena pronto). y tras cenar, pudimos disfrutar de una esplendida puesta de sol, tras lo cual toco, meterse en el saco a descansar para la jornada siguiente.

Nuestro campamento en el Refugio Respomuso.
Las vistas desde el mirador del refugio, un precioso atardecer.

Tras desayunar y recoger las tiendas y dejar el equipo que no ibamos a usar durante la jornada en el refugio, continuamos nuestro camino hacia los Infiernos. Este discurre por el GR 11 y continua hacia Baños de Panticosa. Nosotros continuamos esta ruta ascendiendo desde el refugio hasta el collado de Tebarray y practicamente sigue además el caude del Río Aguas Límpias, el camino nos brindó unas vistas maravillosas de montañas e ibones, además de una buena pendiente para poner a tono nuestras piernas.

El collado de Tebarray, es un paso a unos 2700 metros, en el que hay que escalar ayudándose de un cable, al llegar paso, a la derecha queda el Pico Tebarray, con una ascensión bastante asequible desde el collado, a nuestros piés el Ibón de Tebarray, un poco a nuestra izquierda el Garmo Blanco, y los tres Infiernos, así como el cuello del infierno. Así mismo se puede ver desde el collado el camino que nos lleva al cuello y desde allí las sendas que suben hasta los picos.

Los infiernos desde collado de Tebarray

En la ascensión a los Picos desde el cuello es necesario tener cuidado por posibles caidas y desprendiemientos de piedras, finalmente en la parte alta se hace necesario escalar para poder rodear el collado y ascender a los picos. En este punto hay que tener cuidado ya que los pasos son pequeños y están expuestos a grandes caidas. Yo preferí quedarme aquí y bajar al cuello para esperar al resto que si hicieron cima.

Tras el regreso del resto de la expedición, comenzamos a desandar el camino, y aprendimos que una cosa es subir el colllado de Tebarray y otra diferente es bajarlo. ya superado este paso, todo el camino fue un descenso continuo hasta el refugio, en el que las vistas eran maravillosas, casi de cuento la verdad. Aunque ya el cansancio comenzaba ha hacernos mella.

Una vez en el refugio, recogido el material y tras un merecido descanso, retomamos el camino de vuelta a La Sarra, esta vuelta se nos hizo especialmente larga y aunque fuera bajada nos llevó el mismo tiempo que la subida, tres horas, cierto es que ya a estas alturas el cansancio de la jornada se hacía notar y los ánimos ya estaban bajos, pero finalmente pudimos completar nuestra meta. En total, en la segunda jornada la ruta fueron aproximadamente 20 kilómetors y en total unos 29 kilómetros entre las dos jornadas.

Una ruta espectacular, en la que en ciertos puntos conviene tener cuidado, ir con precuación y si no lo vemos claro, volverse para atras. Y sobre todo una experiencia increible. Agraceder a Virginia, mi esposa, por proponerme y convercerme para estas mágnificas experiencias, y a nuestros amigos Natalia y Silvio, por acompañarnos en esta aventura.

Camino de Munigua-Mulva

Después de mucho tiempo sin publicar y tampoco sin ninguna salida interesante, al menos a algún lugar desconocido, el pasado fin de semana en una salida improvisada, nos calzamos las zapatillas, tomamos las mochilas y nos fuimos a Villanueva del Rio y Minas, para visitar la antigüa ciudad romana de Munigua.

 Partimos y a nuestra llegada a Villanueva dejamos el coche junto al cauce del rio, con las vistas del impresionante puente ferroviario lo atraviesa, desde allí subiendo un poco y bordeando la el lago que tapa la una antigua corta salimos del puelbo y comenzamos nuestra caminata por la dehesa de la Sierra Morena, me gusta más que sierra norte (a ver cuando le devuelven su nombre verdadero). El camino es en gran parte el cordel del  Pedroso, y la señalización excelente, pero lo mejor de todo son las vistas maravillosas de las estribaciones de la sierra y la dehesa. 

El tiempo nublado nos acompaño parte del camino, haciendo más llevadera la marcha,  conforme nos vamos acercando a Munigua,  se va perdiendo de vista la via del tren y comienza a aumentar la densidad de chaparros que hacen el camino más sobreado y vistoso, y de repente tras haber cruzado una reja y en un cerro a nuestro frente se pueden ver los muros de contención del antiguo templo que coronaba la ciudad . 

 Continuado el camino llegamos a la entrada de la antigua ciudad, a la cual no se puede entrar si no se ha  concertado la visita, para ello hay que reservar en la web de la Junta,.

La ciudad tuvo su importancia hasta por los enclaves mineros de la zona, sobre todo en los I y III (como casi todo en la antigüa Roma)  pero fue abandonada, sus ruinas tomadas por un castillo hasta que durante unas excavaciones iniciadas en el siglo XX que aún continuan desvelaron el complejo actual.


Os dejo unas fotos de la ruta y os invito a todos a visitarla, con admiración y respeto por la fauna y vegetación de la zona.  Y si decidis quedaros a comer, en el Mesón el Minero almorzamos de maravilla.  

Sierra Morena y Dehesa
Lavanda silvestre
Los muros de contención de Templo y el arroyo que rodea la colina
Templete de Mercurio con altar para ofrendas.
Vista general de la parte alta de la ciudad.

Dehesa de Camarate, Lugros

Nos comentaron que era un bosque precioso, teneís que ir allí que os va a gustar mucho, pero la climatología se quiso oponer con lluvia y viento para hacernos desistir, pero al contrario de lo que pretendía, nos animó y embelleció aún mas si nuestra experiencia, para recorrer un lugar que nos sorprendio gratamente con los colores del otoño realzados por la lluvia.
El lugar es un «horcajo» (espacio donde dos arroyos confluyen), conservado, según nos comentan en el pueblo por ser una finca privada y lugar de pasto para reses.  Y actualmente es un bosque sobre todo de arces, pero tambien fresnos, cerezos. 
Según una vieja leyenda de Lugros, un padre y su hijo de corta edad, se internaron en una ocasión en el bosque, pero el niño nunca volvió y en ocasiones se puede oir su llanto mientras se camina por el lugar.
Para comenzar nuestra ruta, partimos desde la plaza de Lugros, hasta los depósitos de agua del pueblo, desde allí siguendo un camino claramente, llegamos a una angarilla que atravaesamos y desde este punto, ya las vistas comienzan a ser espectaculares, y son un avance de lo que se encuentra más adelante.  El camino se encuentra marcado por unas marcas blancas y amarillas.

Continuamos por la senda hasta alcanzar una pequeña acequia que seguimos en sentido ascendente sobre el barrancoque da acceso al pueblo, y desde allí alcanzar la senda que sube hasta la entrada en la dehesa, guardada por una amplia cancela y con un pequeño paso lateral para los caminantes.  Aquí comienza realmente el camino, con una pequeña ermita y una construcciones para la gestión del ganado. 

El mientras continuabamos ascendioendo el camino, los colores iban cambiando del verde a unos  amarillo, marron, rojo  cada vez mas dominantes de robles, álamos, arces, serbales, alisos, fresnos. Pudimos oir el canto de de algunos pájaros, cuando la llúvia daba algún descanso, lluvia que por cierto, avivó los colores del otoño en la zona. 

Solo pudimos llegar hasta la mitad de la ruta, un collado, donde el comino continuaba hasta un tentadero, pero la lluvia y sobre todo el viento, nos hicieron desistir de nuestro empeño y deshacer el camino andado. 

Es de resaltar la importancia de este bosque, pues es el mayor robledal del sur de España.  Un lugar que sin duda merece la pena proteger y conservar para generaciones venideras.



Ya de vuelta en el pueblo, aprovechamos para disfrutar de la rica gastronomía local. Como nota de interés, hacer este camino en otoño requiere registrarse/solicitar autorización al Ayuntamiento de Lugros.   En este enlace podeís ampliar en la historia del bosque

Windsurf en Tarifa.

Las fotos de José Luis

Tras mucho tiempo con este blog un tanto abandonado, me he decidido a darle un pequeño empujón, he aprovechado para subir unas fotos en varias de las secciones, si tendras que navegar para averiguar cuales son las nuevas, y pulir algunos flecos que estaban por pulir de la web, creo que ahora ya está un poco mejor.

Espero que disfrutes con las imagenes de la web, muestran lo que se me cruza por el camino, trato de hacerlas con el mayor cariño y máxima pericia que me es posible. Y si lo que ves te gusta o no, te invito a que dejes tu comentario en el blog.

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Peña Jaén, Pico Mágina,Refugio de Miramundos.

iniciando la marcha.

Aprovechando el puente del día de Andalucia, aprovechamos para irnos a las lejanas tierras de Jaén, Sierra Mágina para ser más exactos y conocer esta tierra ignota para nuestros pies.

¿nieve por aquí? ¡sorpresa!

La mañana comenzó muy fresquita y nos invitoó a desayunar en Cambil, de un modo realmente contundente por allí se desayuna fuerte. partimos hasta el punto de inicio de la ruta en el interior de la Sierra Mágina,

Hacia el Pico Jaén libres de mochilas
Una buena subida.

Tras dejar los coches, en un prado junto al camino de Jaén a la Moraleda, a los pies de la Peña Jaén imponente con sus 2147 metros, preparamos las mochilas, rellenamos las botellas y bolsas de agua, ajustamos los bastones y comenzamos la asención por un sendero sinuoso siempre ascendente y repleto de piedras con formas caprichosas, a media subida comenzaron a aparecer pequeñas placas de hielo y nieve que se fueron haciendo más abundantes conforme subiamos, hay que tener en cuenta que ascendíamos por la cara norte y desde una altitud de unos 1600 metros. Tras aproximadamente una hora de subida, llegamos aun pequeño collado desde el que se podía ir al pico Mágina llendo a la izquierda o a la Peña Jaén a la derecha, decidiendonos por esta última ya que la teníamos justo al lado. Así que dejamos las mochilas para ir un poco más ligeros y tras una pequeña ascención por un tramo de roca caliza bastante fragmentedada, no conviene confiarse, llegamos a la cima de la peña y la cruz que la coronaba, Las vistas impresionante, y nos dio para hacernos una idea de la altura que habíamos ganado.

En el Pico Jaén

Tras la fotos de rigor bajamos al collado, y con las mochilas al hombro de nuevo continuamos por la cuerda de la montaña, observados a ratos por pequeños grupos de cabras montesas que nos observaban y apartaban a nuestro paso, llegamos al pico Mágina, el más alto de la provincia de Jaén con sus 2167 metros de altura, desde allí toda la provincia de Jaén, y sus alrededores de Granada, Córdoba y Almería estaban a nuestros Pies, las cumbres cubiertas de nieve de Sierra nevada se divisaba al sur en toda sus plenitud.

Cabras en los alrededores

Una vez alcanzada la cubre de nuestra ruta y tras la toma de las fotos de rigor, continuamos nuestra ruta hacia el refugio de Miramundos. Un refugio donde según nos comentaron unos montañeros locales, el viento da la vuelta, Así tras una hora larga continuando por la cuerda de la sierra , comenzamos a divisar a lo lejos el refugio,

Un refugio , pequeño, reparado recientemente y el que los clubes de montaña de la zona mantienen muy bien, y que sobre todo tiene unas vistas espectaculres como pudimos comprobar a la mañana siguiente.

Al llegar dejamos sacos y esteras en la parte alta del refugio, y mientras unos preparaban los hornillos otros fuimos a por hielo para hacer agua y tomar una bebida caliente, pues el frio ya comenzaba a hacer acto de presencia a pesar de que el sol estaba alto, el termómetro en lado soleado del refugio solo marcaba 7 grados bajando a hasta los 2 grados cuando ya anocheció, supongo que durante la noche bajaría aún más . Mientras andabamos en nuestros quehaceres todos encerrados en el refugio varios grupos de cabras se acercaron a inspeccionar los alrededores del refugio mientras las contemplabamos por la ventana.

La cabra observando lo que haciamos.
Una cabra curioseando.

Toda la noche sentimos el silbar del viento, a pesar de que las ventas y contraventanas del refugio estaban cerradas y al salir era como si el viento diera la vuelva como nos comentaron el día anterior.

El refugio y el grupo.

Ya de amanecida y con un sol esplendido, aprovechamos para tomar un buen desayuno, recoger toda nuestra parafernalia y retomar la marcha, esta vez para descender por el camino «oficial» que lleva desde refugio que parte desde el centro de visitantes para desviarnos a nuestra derecha subiendo por un pequeño collado y llegar a los llanos de mata behid. y desde allí realizando una breve subida nos desviamos antes de alcanzar el camino de subida y continuamos atrochando realizando un rodeo a la Peña de Jaén, alcanzamos nuestro punto de partida.

En lo llanos de mata behid

Cruce caminos en la ladera sur.
Rodeando el pico Jaén, para atrochar.
Almuerzo/Merienda al terminar la ruta.

Fue una ruta muy interesante que realizada de este modo nos aportó un extra de dificultadad por su ascenso por la cara norte debido a lo escarpado y a escasa nieve que había en las zonas más altas. Nos aportó unas vistas mágnificas vistas a la sierra de Jaén y nos permitió disfrutar de una compañia excelente. Ló unico a destacar es que en el descenso por la cara sur, los pinos están infectados de procesionaria, que por estas fechas ya andaban por el suelo, con el consiguiente riesgo para los álergicos y quienes suban con animales.

Minas de San Telmo y Confesionarios

Tras mucho tiempo demorándolo, finalmente conseguí hacerlo, visitar las antiguas minas de San Telmo y Confesionarios, en Huelva.

Son dos antiguas minas abandonadas, San Telmo en 1992 y Confesionarios a principios de siglo XX. Muestran un gran contraste, debido a la diferencia de tiempo que llevan sin ser explotadas, mientras una muestra aún las cicatrices de la explotación, los antiguos edificios y una corta impresionante en espiral para el paso de los camiones, la otra se nos recibe en el interior de un bosque de pinos entre los que destaca la enorme chimenea y una corta rodeada de una frondosa vegetación.

Al llegar a la pedanía de San Telmo, preguntamos en la gasolinera, por donde se llegaba a la mina y tras indicarnos amablemente el camino, el operario nos comentó «visitad la mina, pero no trabajadla». Comenzamos la visita por el mirador, desde donde se contemplaba la totalidad de la corta, más de 500 metros de extremo a extremo por su parte más ancha, el pozo y su malacate además de la ruina que lo consume todo, además sobre nuestras cabezas una pareja de buitres negros nos sobrevolaba . desde allí descendimos por los senderos marcados por la Junta de Andalucia hasta llegar al malacate y los edificios que aún quedan en pie, y corroido por el oxido y vandalizado, pero a pesar de todo el Malacate, de diseño alemán continue en pie como un coloso dominando el lugar. Dado que la valla que rodea el lugar está caída y rota pudimos acceder al interior y ver el malacate de cerca y la boca del pozo, hoy inundada y de aspecto tenebroso, el antiguo edificio de las duchas cerrado, incluso parece que se han llevado el torno que se puede ver en en otras fotos que había por internet.

También pudimos ver los montones de escombros desechados por la mina, en los carteles explicativos, se indicaba que debido a las voladuras los techos de las viviendas de la aldea minera, ¡tenían que repararse con frecuencia!, algo impensable hoy día. Ahora el abandono del lugar es más que evidente, los carteles explicativos están casi todos en mal estado o incluso desaparecidos, pero el lugar merece la pena la visita ya sea por su colorido y abandono para la fotografia, para recordar un pasado no tan lejano donde la mina proporcionaba prosperidad y trabajo a los habitantes de la zona.

Tras concluir la visita a San Telmo, pasamos a la Mina Confesionarios, esta mina tuvo una corta vida , pues solo estuvo en explotación desde 1886 hasta finales del siglo XIX, al parecer en varias ocasiones se ha intentado retomar la producción pero esto no ha sido posible, al menos de momento y ya puestos espero que continue así mucho tiempo. Esta mina fue la que llamó mi atención por visitar el lugar. Su nombre, «Confesionarios» me llamó la atención y tras investigar un poco, este se debe a las formaciones rocosas en el afloramiento del mineral en el yacimiento.


La corta de esta mina es circular y se encuentra totalmente rodeada de vegetación, se aprecian un par de cortes la orografia de la corta , que debería ser el lugar por donde el ferrocarril llegaba a la mina. Solo queda en pie una gran chimena y un edificio que no es visitable y que se encuentra ocupado por una rehala de perros y que despide un hedor casi insoportable.

Al poco de comenzar la ruta, nos encontramos con el primer «confesionario» o afloramiento de mineral ya explotado. Sus formas peculiares, dan pié a que se llamen de ese modo. Avanzando por el perímetro de lacorta llegamos a la Chimenea y la rehala, una pena que no se pueda visitar la chimenea y el edificio de la misma. Posteriormente llegamos al segundo «confesionario» , que se encuentra casi al borde de la corta. Tras completar la vuelta a la misma y disfrutar de las vistas, pudimos comprobar que el lugar ya está integrado con el paisaje. Un paisaje que cambia del azul del cielo, al verde los pinos , después tonos rojizos y amarillos de la tierra y posteriormente al negro/rojo de las aguas que inundan la corta teñidas por el mineral.

Para terminar la visita tambíen visitamos las antiguas instalaciones del ferrocarril, aledañas a la via que une Huelva y Zafra. También abandonadas y que constiuyen un buen ejemplo de las ifraestructuras necesarias para la explotación minera de la zona .

Silla del Papa, Sierra de la Plata

Recibimos el año con una pequeña pero interesante ruta por la Sierra de la Plata  en Bolonia, para visitar la Silla del Papa, con un día espléndido, con sol, buenas temperaturas y sin viento.

Para comenzar esta ruta ascendimos por la carretera que discurre desde Bolonia hacia el mirador de Camarinal, allí, se puede dejar el coche, o si  prefiere en el mirador que hay un poco más arriba, o incluso al final de la carretera, donde una valla impide el paso.  (Ojo hay instalaciones militares en la zona y es mejor no molestarles.

Desde la vaya que impide el paso, a la derecha asciende una pista asfaltada, que ha conocido tiempos mejores, que se dirige ha unas instalaciones militares, tomando esta pista y un poco antes de llegar a la zona militar, a nuestra derecha de nuevo parte un camino de tierra que es el que debemos tomar , para llegar hasta la Silla del Papa.

!!amos para alla¡¡
Caminando por el bosquecillo
Camino a la silla del Papa
¿¡que se puede decir de estas vistas¡? Desde luego eligieron bien el sitio para hacer el poblado

Esta pista inicialmente discurre por una zona arbolada y poco después da un pequeño valle entre dos lajas de arenisca, zona que se usa para escalada y de una belleza singular por las formas que los elementos han grabado en las rocas, desde aquí la pista nos lleva más o menos por el collado entre las dos cimas, nuevamente despejada y con algunos árboles con formas muy forzadas debido a los fuertes vientos de levante.

Los arboles torturados por el viento.

Conforme avanzamos vemos en el cerro de la Silla del Papa, las antenas construidas en su cumbre y que dominan altaneras toda la zona. Al llegar encontramos un camino de piedra ascentente que se dirige a la cumbre y a nuestra izquierda una valla que delimita unas antiguas ruinas, desde aquí continuamos buscando la forma de llegar a la cumbre y finalmente lo conseguimos, comprobando que el esfuerzo mereció mucho la pena por las estupendas vistas de toda la zona . Para nuestra sorpresa en la cima coincidimos con una amable pareja que aparte de ayudarnos a tomar unas fotos, resultó que eran guias de Arqueoroutes y se ofrecieron a contarnos un poco de de la historia del lugar

Para comenzar resulta que las antenas están enclavadas sobre un antiguo emplazamiento prerromano, posiblemente iberico o fenicio, que estaba fortificado y que se ceía en espiral al pico. Esto por supuesto provoco un daño irreparable en el lugar, así mismo nos mostraron unas escaleras labradas por sus antiguos pobladores y descenciendo desde el pico, nos mostraron los restos de los antiguos moradores, restos de asientos para vigas, terrazas, todo ello integrado en la arenisca, ceñida a los muros de roca y dejando una avenida central que llegaba hasta donde ahora están las antenas. Ah y se me olvidaba el grabado del índalo que hay también en la zona.

También nos mostraron, alguna formación rocosa singular, los restos de la antigua muralla que defendía el emplazamiento. Para terminar por donde llegamos a los restos arqueologicos recientemiente descubiertos de una antigua iglesia visigoda y un monumento funerario romano. Este último descubrimiento, desbarata las ideas de que la zona quedó despoblada cuando mandaron a los pobladores a asentarse en Baelo Claudia. Por cierto el nombre antiguo del monte era «Monte Bailo» si no recuerdo mal.

Por todo estas explicaciones quedamos muy agradecidos a Miguel de Arqueorutes que gustosamente se ofreció a acompañarnos.

Finalmente el sol y el frio comenzaron a caer y volvimos por el mismo camino hacia donde dejamos el coche. Un lugar maravilloso y con mucha historia, un ruta cortita, pero con unas vistas y un paisaje inmejorables. Ideal para recibir el año que comienza.

Por Sierra Alta, Benaocaz

El pasado fin de semana, y gracias a una tregua en los días de lluvias , y aprovechando que nos econtrabamos en Benaocaz con un esplendido día soleado, mientras unos escalaban, yo aproveche para dar un paseo por los alrededores y decubir un poco la zona, de Sierra Alta,  (por encima de los escaladores).   Todo comenzo en el aparcamiento, donde se dejan las furgonetas para ir a escalar, desde allí y tomando la senda que lleva a las vías de escalada, deje allí a mis compañeros y continue hacía la parte alta de la sierra. Una via más o menos marcada que pronto desaparece entre un terreno de matorral, al poco de avanzar, me sorprendio muy gratamente el canto de los pájaros, que tantas veces he echado de menos al ir en grupo ya que nuestro ruido los ahuyentaba.

Mientras subia, a mi izquierda quedaba la silla y abajo se podía ver ubrique y el cerro de la ciudad romana de Ocuri.  En la parte alta de la sierra, se podían ver curiosas formaciones de roca caliza, algunas con formas divertidas y frente a mi, a lo lejos las ruinas del Castillo de Aznalmara .   Ralentice mi paso y me armé con las cámaras dispuesto a «capturar» todo.    A pesar de mi lento y cuidadoso caminar, unas perdices volaron asustadas por mi presencia, así que opté por caminar unos pasos,  y deterneme a observar , para comenzar de nuevo a caminar.  Así pude disfrutar del entorno, de las aves y de las estupendas vistas de la zona.

Un poco más adelante me econtré con un grupo de vacas que pastaban y rumiaban al agradable sol, las rodeé y continuando mi investigación de la zona. Una cabra montesa hizo su aparación en unos riscos cercanos, pero se fué tan rápido como apareció.

Tras llegar a los límites del cerro, un precipicio importante que daba a la carretera que lleva a Benaocaz, me hicieron dar la vuelta  para volver al punto de partida.   Pero durante todo el trayecto puede observar buitres leonados , currucas capirotadas , cojugadas montesinas y algunos otros que no supe identificar.

Ya de vuelta, y tras seguir un poco la carretera, di con un camino abandonado muy interesante, conocido como colada del chite,  Este camino me llevó hasta la entrada al sendero del Ojo del Moro,  y ofrecia unas vistas espectaculares a Ubrique, Benaocaz y toda la Sierra del Caillo.

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De camino a la zona de escalada

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Cojugada Montesina

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Cojuada Montesina

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Cogujadas Montesinas

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¿que os suguiere?

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curruca capirotada

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Benaocaz

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la cima de la sierra alta

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Colada de Chite

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Colada de Chite

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Puente del sendero del Ojo del Moro

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Colada de chite

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Sendero Ojo del Moro

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Benaocaz

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Ubrique